Paul Klee (material pedagógico de su teoría de la configuración pictórica, años 20′)
…
Carpe noctem
Que la noche no nos preguntara nada.
Que sólo las lámparas encendidas para los amigos
dieran cuenta de un afecto remoto y excesivo.
Que no pudiera medirse el tiempo que guardó esa
promesa el gesto ciego de la intimidad -tan espontáneo
que ya no nos pertenece.
Que el silencio fuera el secreto de una anécdota
y
que la anécdota fuera tan insignificante
que en su aparente oscuridad durmiera
como un grillo.
Que lo que no sabemos qué es advenga para todos,
fingiendo todos saber que no lo saben.
Ellos preguntaron: «¿Cómo será esta noche?
¿Qué fin tendrá la noche?
¿Próspero o adverso?»
En el sentido una apuesta más secreta nos vigila
y olvida.
Arturo Carrera: Noche y día, Losada, Buenos Aires, 2005, pp. 21-22